8 señales de alerta
Los perros y gatos, al igual que los humanos, pueden experimentar una variedad de problemas de salud a lo largo de sus vidas. Sin embargo, a diferencia de las personas, ellos no pueden expresar verbalmente lo que sienten, por lo que es vital que los dueños estén atentos a cualquier cambio en su comportamiento o apariencia física.
Principales señales de alerta que todo tutor debe conocer:
1. Cambios en el apetito: Una disminución o aumento repentino en el apetito puede indicar problemas gastrointestinales, dentales o incluso enfermedades sistémicas como diabetes.
2. Pérdida o aumento de peso inexplicable: Cualquier cambio drástico en el peso sin cambios en la dieta o el nivel de actividad, no debe ser pasado por alto. La pérdida de peso podría estar relacionada con enfermedades como el cáncer, infecciones crónicas o problemas gastrointestinales, mientras el aumento de peso podría indicar hipotiroidismo o incluso una acumulación anormal de líquidos en el cuerpo.
3. Comportamiento letárgico (somnoliento) o disminución de la actividad: Un perro que se muestra menos activo de lo habitual puede estar sufriendo de dolor, infecciones o enfermedades crónicas.
4. Tos, estornudos o dificultad para respirar: Estos síntomas pueden ser signos de problemas respiratorios, alergias o enfermedades cardíacas.
5. Vómitos o diarrea: Aunque estos pueden ser comunes ocasionalmente, si son persistentes o severos, requieren atención veterinaria inmediata. Si tienes dudas puedes agendar una teleconsulta aquí.
6. Cambios en la orina o las heces: La presencia de sangre, un cambio de color o consistencia en las heces, o dificultad para orinar, son señales que deben ser investigadas.
7. Rascado o lamido excesivo: Esto puede indicar alergias, infecciones de la piel o infestaciones de parásitos como pulgas y garrapatas.
8. Cambios en la piel o el pelaje: Pérdida de pelo, enrojecimiento, bultos o cualquier cambio inusual en la piel debe ser revisado, ya que también puede ser causado por alergias o infecciones.
Recuerda que estas son solo señales de alerta, siempre es recomendable la experticia de un veterinario para un diagnóstico específico. Agenda una consulta a domicilio para tu peludo aquí.